Fachada Ventilada

La fachada ventilada con cámara de aire elimina los puentes térmicos que se crean en los forjados pues el sistema va siempre por delante de ellos eliminando la dispersión térmica hasta un 30%.

Sistemas de Fachada Ventilada

Karrat S-7

Sistema para el revestimiento de fachadas ventiladas de fijación directa y oculta.

Grapa oculta DGO

DGO es un sistema basado en el anclaje puntual de las piezas de revestimiento mediante grapas.

Grapa Vista DGV

Anclaje visto que se atornilla al perfil vertical y sujeta la placa con unas lengüetas de las grapas.

Químico DGQ

Sistema de fijación mediante adhesivo especial invisible a la vista, paneles de fachada ventilada.

Éstos aislamiento exterior permiten que, en verano y en invierno, se mantengan estables las temperaturas interiores.

En invierno limitan los peligros de condensación y las sensaciones de baja temperatura.

La temperatura interior no oscila bruscamente a pesar de las interrupciones de la calefacción por la noche o de las puntas de las oscilaciones de la temperatura exterior invernal y estival.

El efecto chimenea

La cámara ventilada es un sistema de aislamiento del exterior donde se crea el efecto chimenea, el cual es debido al calentamiento del paramento exterior (placa) y provoca una variación de la densidad de la capa de aire del espacio intermedio con respecto al aire ambiente, con el consiguiente movimiento de ascensión.

De izquierda a derecha, nos encontraríamos con lo que sería el cerramiento del edificio.

Adherido a la superficie del cerramiento, algún tipo de producto encaminado al aislamiento térmico-acústico del edificio.

A continuación un espacio libre, cámara y seguidamente la placa exterior, que le daría la apariencia deseada al edificio.

Verano

Una gran parte del calor radiante es reflejado hacia el exterior, se filtra a la cámara activa el efecto chimenea, por lo que sólo una pequeña parte del flujo de calor es absorbida por el edificio.
La reflexión del calor, puede aumentarse utilizando colores claros en el paramento.

Invierno

En épocas de frío, el muro portante actúa como acumulador del calor interior que le es más difícil transmitirlo al exterior debido a la capa aislante, por tanto, lo devuelve al interior.
Y además la circulación de aire en la cámara ayuda a la estabilización térmica.

Eliminación de puentes térmicos

La corrección de los puentes térmicos permite reducir notablemente las dispersiones globales (incluso en un 30%).
Se obtienen grandes ventajas de tipo energético. Y elimina las radiaciones directas con la consiguiente protección de la envoltura del edificio.

Mediante el diagrama de Glaser se puede observar que en el aislamiento exterior no se forma condensación, porque la curva de la presión del vapor de agua en ambiente saturado no intercepta la curva generada por la presión ejercitada por el vapor de agua en ambiente húmedo pero no saturado.

A la izquierda pared con aislamiento interior
A la derecha pared con aislamiento exterior.
Curva AZUL presión Real.
Curva ROJA presión de saturación.

Confort térmico y acústico

El aislamiento exterior tiende, en verano y en invierno, a mantener estable la temperatura interior. En invierno limita los peligros de condensación y las sensaciones de baja temperatura.

La temperatura interior no oscila bruscamente a pesar de las interrupciones de la calefacción por la noche o de las puntas de las oscilaciones de la temperatura exterior invernal.